Ser... humano
Cuentan que una vez un
hombre le preguntó a otro
- Oiga, ¿usted como se definiría
políticamente?
- No sabría decirle -le contestó- Me gusta
el orden y el cumplimiento de las normas, y creo en el mérito y en el esfuerzo
para conseguir las cosas. También me gustan las tradiciones porque creo que nos
muestran nuestras raíces. Amo mi tierra, amo a mi gente, me gustaría que las
cosas buenas siguieran siendo así eternamente, creo en el Dios de mis padres y
de mis abuelos....
- Entonces usted es de derechas, ¿no?
- Sí, supongo que soy de derechas. Lo que
pasa es que también adoro el progreso, creo en la distribución justa de los
recursos. Pienso que la solidaridad con los desfavorecidos por la vida es una
labor ineludible, y también creo en la igualdad entre las personas, en la
libertad para elegir entre la multitud de opciones religiosas, políticas… y por
supuesto que la única orientación sexual criticable es la que atenta contra la
libertad y dignidad de otros, etc.
- Da la sensación que es usted más de
izquierdas.
- Es posible, pensándolo bien, seguramente
soy de izquierdas.
- Si cree unas veces que es de derechas y
otras de izquierdas, ¿no será que lo que pasa es que usted de centro?
- Sí, tiene razón, soy de centro porque
creo en la moderación y en la tolerancia. Creo que en el término medio está la
virtud, y el centro político es un punto equidistante de la izquierda y la
derecha. Así que, definitivamente soy de centro.
- Y ¿no le pasará a usted que no sabe lo
que quiere ni sabe realmente lo que piensa?¿Como se puede ser unas veces de
izquierdas, otras de derechas y otras de centro?
- Y ¿no le pasará a usted que intenta
simplificarme? Analizando lo que le iba diciendo ha intentado clasificarme en
uno de los bloques políticos, solo para etiquetarme y decirme de esta manera
quienes son los míos y quienes son mis enemigos. Así podrá usted predecir de
una manera sencilla mi comportamiento futuro.
Pues debe saber, señor mío, que no soy
simplificable, que no soy etiquetable y por tanto, no va a ser usted capaz de
predecir de manera sencilla mi comportamiento, porque quiero quedarme con lo
que yo creo que es mejor de cada cosa, quiero tener ideas propias que no tienen
porque encuadrarse en un bloque político.
¿Sabe lo que realmente creo ser?
- No, dígalo y defínase de una vez
- Creo ser… humano.
Es posible que esto que
cuentan sea mentira, pero si deseamos la evolución del género humano, es decir,
pasar al siguiente nivel, deberíamos dejar de etiquetar a la gente no solo en
el terreno político, sino en general.
Y, lo que es
probablemente más importante: evitar ser etiquetados. Hay veces que nos creemos
las etiquetas que nos ponen y actuamos de acuerdo a ellas.
Una etiqueta, un
calificativo, simplifica a las personas y las desposee de la complejidad y
matices que caracteriza a un ser humano, explica su comportamiento desde un
único punto de vista y permite juzgarle en 10 segundos.
Y, juzgando a alguien en
10 segundos, probablemente nos estemos equivocando...
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