Carta a los partidos políticos
Queridos partidos políticos:
Soy un niño de cuarenta y ocho años que se ha portado bien durante toda la legislatura. He pagado todos mis impuestos y he cumplido todas las normas. Me he portado tan bien que no me han puesto ni una multa de aparcamiento
Por eso quería pediros que para las próximas elecciones me echarais algunas cosas.
Lo primero que no me pongáis muy difícil lo de votar, últimamente lo paso fatal tratando de decidir a quien puedo votar. Al final elijo al que me parece menos malo y a mi me gustaría votar al más mejor.
No me gusta que os peguéis ni durante las elecciones ni después. Alguien os ha dicho que a nosotros, los niños, nos gustan los hombres y mujeres duros que insultan continuamente, pero no es verdad.
Cuando estáis en vuestro cole, deberíais escucharos los unos a los otros. Está muy feo que os pongáis a jugar con el móvil mientras el profe está hablando en el púlpito, y sobre todo, no habléis mal, porque cuando empezáis a hablar mal, yo me pongo triste y quito la tele y me pongo yo también a jugar con el móvil. Luego mis papás me regañan y dicen que estoy todo el día con el móvil.
Así que, por favor, si no os ponéis de acuerdo en algo, os llamáis por teléfono (que os dan uno muy chulo), discutís, os insultáis un poco si hace falta, pero en la tele tenéis que hacer como si os ajuntarais mucho para que los niños como yo, no nos pongamos tristes.
Me gustaría también que me echarais candidatos listos, educados, preparados y sobre todo muy muy respetuosos. Podéis regañar a los malos que no respetan los derechos humanos, porque en mi cole dicen que los derechos humanos son muy importantes. Pero sólo a esos. Los niños somos muy sensibles.
Si por una casualidad ganáis el concurso de las elecciones, me gustaría que me echarais un gobierno majo. Los ministros, por favor, todos muy buenos y listos, si además saben mucho del tema que tienen que manejar, eso debe ser orgásmico para todos, que no sé lo que significa, pero mi profe de lengua dice que es algo muy bueno que los niños todavía no entendemos.
Y si en el concurso os toca estar en la oposición, os pido que me echéis una oposición buena, pensando no en ganar las siguientes elecciones, sino en el bien de todos los niños, aunque eso signifique, a veces, apoyar a los que han ganado el concurso.
Queridos partidos políticos, si me traéis todo eso, prometo ser un niño aún mejor, pagando más impuestos, cumpliendo todas las normas, sin dejarme ni una y yendo a votar muy, muy contento.
Manolito.
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