Suplantator el extraterrestre (2) - El viaje

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Suplantator salió del despacho ovoide, atravesó la sala de espera y se encaminó hacia las dependencias centrales de los Intervencionators. Su sensación era agridulce: le habían asignado una misión extragalactotórea, lo que le llenaba de una honda satisfacción, pero, saber que Auxiliator sería su compañero, le llenaba de angustia. Sabía que tendría que enfrentarse a un montón de problemas.
Cuando se encontraba caminando en un largo pasillo, comenzó a oír a lo lejos:
- Suplantator, Suplantator

Miró hacia donde aquella voz procedía y comprobó que sus temores se habían hecho realidad. Era Auxiliator que se acercaba a él corriendo.
- Suplantator, voy a ir a una misión extragalactatórea y además contigo.

Auxiliator sonreía entusiasmado (suponiendo que tuviera boca). Era obvio que no podía estar más contento. Suplantator, en cambio, sin entusiasmo ninguno, dijo
- Sí. Ya sé, me lo acaban de decir.
- Partimos mañana
- Sí, aprovecha el tiempo para hacer los preparativos y aprender todo lo que puedas sobre las formas de vida que nos vamos a encontrar. Tendrás que elegir un cuerpo de reposo -dijo Suplantator con gran frialdad
- ¿Cuerpo de reposo? -dijo Auxiliator
- Sí, recuerda la academia de Intervencionators, nos introducimos en el cerebro de esas formas de vida y lo controlamos, cumplimos nuestra misión, cambiamos ligeramente su forma de pensar y los abandonamos. Mientras decidimos cual será nuestro próximo objetivo necesitamos un cuerpo de reposo. Un cuerpo donde estar a salvo.
- Ah sí, ya me acuerdo -dijo Auxiliator- Suspendí la asignatura Cuerpo de Reposo.
- Pues repásala y elige uno. Imagino que guardas los apuntes.
- Naturalmente -dijo Auxiliator.
- Mañana a la hora octava, nos vemos en la sala de los Transportators -dijo Suplantator- Sé puntual.
- Allí estaré como un clavo.

Faltaban unos minutos para la hora octava y Suplantator se dirigió a la sala de Transportators. Allí estaba ya Auxiliator que comenzó a dar saltitos cuando le vió. Estaba claro que seguía entusiasmado y tal vez un poco nervioso.

- Suplantator, Suplantator, he hecho todo lo que me dijiste y he absorbido cientos de gigabits de información sobre esa forma de vida.
- Eso está genial. Ya verás como nuestra misión será un éxito -dijo Suplantator sin ninguna convicción.

Caminaron a lo largo de un pasillo sin fin dejando a su derecha puertas que comunicaban con distintos Transportators. Después de un tiempo caminando, que a Auxiliator le pareció una eternidad, llegaron a una zona que tenía las paredes rojas luminiscentes e intermitentes. Esa era la forma de indicar que habían alcanzado los Transportators Extragalactatóreos. Auxiliator se puso aún más nervioso y comenzó a dar saltos cada vez más perceptibles. Suplantator intentó calmarle

- Tranquilo, Auxiliator, el viaje es indoloro.
- Sí ya sé. Pero es la primera vez que salgo de la galaxia. -dijo Auxiliator
- Yo también. No pasa nada.

Se pararon delante de una puerta y la atravesaron. Auxiliator dijo
- ¿Cómo sabes que es ésta? ¿Y si nos equivocamos?
- Tranquilo, es ésta. -dijo Suplantator

Se sentaron y Auxiliator que seguía cada vez más nervioso dijo
- No puedo ir, no puedo
- Tranquilo, no pasa nada -dijo Suplantator
- Avísame cuando falten diez minutos para que salgamos, tengo que prepararme
- Tranquilo
- Por favor, avísame, avísame. Necesito prepararme -insistió Auxiliator.
- Ya estamos -dijo Suplantator tras presionar ligeramente un botón.
- ¿Ya estamos, donde?
- Ya estamos en la Tierra. Te he dicho que no era nada. Voy a hacer transparentes las paredes para que veas la ciudad en la que viviremos. Se llama Madrid -dijo Suplantator mientras presionaba el mismo botón de antes
- Hala, que bonita. Hay un montón de cajas que salen del suelo y estamos encima de otro montón de palos con pelos verdes.
- Suplantator, ¿seguro que has estudiado esta forma de vida?
- Sí, seguro
- Pues no sé. Deberías saber que esas cajas se llaman edificios y los palos con pelos verdes son árboles
- Ah, es verdad, algo he leido de eso. -dijo Auxiliator y añadió- ¿ellos no pueden vernos a nosotros?
- No, nosotros somos formas de energía sofisticada. Basta con emitir en frecuencias que ellos no pueden captar y nos hacemos invisibles para ellos. Los terrestres suelen tener visitas de otros mundos menos avanzados que el nuestro, que son incapaces de hacerse invisibles, los muy torpes.
Los terrestres, como es lógico, se asustan cuando los ven e incluso tienen un nombre para eso: OVNI.
- Qué torpes todos -dijo Auxiliator- con lo fácil que es hacerse invisible. Es básico.
- Bien, ahora nos materializaremos entre los árboles de un parque para que no nos vean. Esos árboles que ahora mismo estás viendo, se llaman Casa de Campo.
Suplantator añadió
- Auxiliator, muéstrame el cuerpo de reposo que has elegido. Yo te mostraré el mío, tenemos que familiarizarnos con nuestros respectivos cuerpos.

Suplantator se materializó entonces en un cuerpo de un hombre joven, como de unos 35 años vestido con ropa informal y discreta. Auxiliator lo hizo en un hombre de unos 40 años. Sin embargo hubo algo que llamó poderosamente la atención de Suplantator y dijo:
- Auxiliator, las ropas de ese cuerpo tuyo me resultan raras. ¿Seguro que has elegido el año correcto, 2.018, cuando has hecho la selección?
- Seguro.
- Pero esas botas, ese sombrero, no se parece en nada a la ropa que yo llevo, déjame que haga una búsqueda en la base de datos.

Suplantator sacó un aparato que cualquier terrestre hubiera confundido con un móvil y automáticamente Auxiliator dijo
- Hala, qué chulo, ¿me lo dejas?
- No, es un losabetodator combinado con un sirveparatodator en un dispositivo que parece un móvil terrestre. Usa los tuyos, si quieres
- ¿Pero te has traído un losabetodator? Yo no, haber avisado que se podía.
- Auxiliator, es básico. Hay que llevar un losabetodator y un sirveparatodator en las misiones extragalactatóreas. ¿No lo recuerdas de la academia?
- No -respondió Auxiliator- suspendí Misiones Extragalactatóreas.

Suplantator miró al techo del habitáculo con sus recién estrenados ojos, en actitud de resignación. Después captó con su losabetodator camuflado la imagen de Auxiliator y el dispositivo se puso a buscar inmediatamente. Dio una coincidencia, Suplantator se asustó aún más y dijo:
- No puedo creerlo, Auxiliator, has elegido Napoleón Bonaparte como cuerpo de reposo

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